HERIDA ABIERTA

 Desiderio Peralta Torres

Me entere de tu muerte
y danzaron con furia
mis pupilas inertes de expresiones

Mi mundo de girasoles
se marchito
lo deshoje a dentelladas

Y mi risa
la olvide
en un cementerio anonimo 
en una una carcel
cruzada y abandonada.

Ahora tu nombre
lo vivo recogiendo de a pocos
del obituario de los periodicos
tirados en mi calle desierta

DE MI CORAZON AL TUYO

Santiago!

Ya tu presencia llena esta soledad individual
que se ha cimentado en años

Ya tu solo movimiento de manos
en un monitor anónimo, mato la aflicción
con la que luchado, desde años

Ya se!                       que combatirme a mi
sera como combatirte a ti
por darte la papilla

Ya se!            que desvelarme incansablemente
por encontrarle solución a mi prosa existencial
sera como despertar por ti   
porque tu hambre no tiene tiempo

Ya calcule hijo                miles de interrogantes
antes que nazcas y ninguna tiene sentido

Ya cavile sin denuedo y me impulse en el afán
de comparar mi vida sin ti y aun aquello
se queda sin asidero

Sera Hijo!  
el temor de tu inmensa responsabilidad?

Sera mi niño!
el miedo a la primera vez?

Que sera esta emoción?
que me levanta en silencio
inundado en llanto oculto
que me acompaña de vuelta a  casa
escondido, como lo llevo a Desiderio
que azota mis presentimientos
mas primitivos y recónditos

Que sera Hijo?

Lo que se 
es que te espero con ansia
para que seas el amigo que nunca tuve
para que cuando mis lágrimas caigan
envuelvas tus brazos en mi y vuelva el día
para que me acompañes, peregrino
no              como hijo 
sino           como camarada
como patas del alma

Que mi dolor sea mi dolor
pero con tu compañía
sea mas fácil de llevar

Que tu dolor sea tu dolor
pero con mi experiencia
pueda ser posible 
amalgamar tu situación

Santiago 
aun no estas presente
y ya tengo tantas cosas que contarte
por lo pronto 
esta sera       la primera interlocución
de mi corazón al tuyo

SANTIAGO

Yeagob
Ya'akov
יַעֲקֹב
Διδακμος

y habito entre nosotros.

EXTRAVIO

Y de nuevo las palabras 
como piedras
rompen el silencio
los vidrios en mis ojos

Y de nuevo tu 
oh! extravió
cincelando mi musculo izquierdo